martes
Sólo quedan dos días, escuché en la radio, para el fin del mundo
Llevo sudor en la frente
recorriendo siglos tu presencia,
desde el inframundo
hasta las selvas más espesas.
Durmiendo en angostos lechos
fabricados de lluvia y paja,
vendiendo mi alma
al peor postor.
Triturando mi desayuno
de papillas imaginarias,
buscando tu huella
hasta en los colmillos de elefante.
Escalé las más altas torres,
inhalé sucios pasillos
de alcanfor y metralla.
Nunca me perdí,
llevaba una brújula
de instantes amorosos al costado.
Ahora estás frente a mí
y pierdo el rumbo.
Sólo quedan dos días,
escuché en la radio,
para el fin del mundo.
Y me siento más perdida
con tu mirada clavada
y tu arrebato
que maldigo los planes concebidos
maldigo la ilusión a largo plazo.
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3 comentarios:
El amor como guía, pues la brújula. La vida entera por esa búsqueda, tantas ilusiones, tantas expectativas, y después ¿qué? Malditos esos planes concebido, esa ilusión a largo plazo.
Impactante. Besos.
Me desgarran esos sucios pasillos y esos instantes amorosos en el costado...
A consumirse, pues, en el amor, si sólo quedan dos días.
Un beso
dos días son cuarenta y ocho horas. ... 172.800 segundos. Meri, toda una eternidad para hacer de la cópula un amor eterno http://fragmentsdevida.wordpress.com/2014/05/30/poemas-eroticos-de-meri-pas-blanquer/
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